Parece mentira que estemos ya a las puertas de comenzar un año nuevo, el 2019, y casi no me haya enterado de este que hoy dejamos atrás! Tal es así, que acabo de ver en el blog, que el último post que publiqué fue en abril😲... Sé que esta es una frase muy de ascensor, pero es que... "vaya cómo pasa el tiempo, verdad?". Intento hacer balance de todo lo vivido en el 2018 y casi, ni lo recuerdo y esto es síntoma de que en el 2019 no quiero que esto me vuelva a ocurrir.
Sé que he vivido este año tan rápido, que casi no me he enterado ni que lo viví. Qué pena, no?😡. Pero es que te metes tanto en la vorágine del día a día que no saboreamos la vida... Triste, muy triste...
Es verdad que, por suerte o por desgracia (lo habrá para todos los colores), tenemos que trabajar para vivir... pero, ¿no crees que al final, estamos viviendo para trabajar?. No puede ser así!! Y lo peor de todo, es que está en nuestras manos revertir esta situación y no hacemos nada para cambiarlo. Mal, muy mal!
Vale que tenemos que ser responsables e implicarnos en todo lo que hacemos, perooooo, ¿qué pasa cuándo no nos implicamos en vivir?. Si echo la vista atrás, sólo me viene a la retina: trabajo, trabajo y trabajo!😕. Qué triste, verdad? Así que por esto, hoy quiero poner la semilla de lo que será mi próximo año. Y sé, que no quiero que sea como este, sé que será diferente porque de eso, me voy a encargar con todas mis fuerzas.
- Problemas de salud (míos y de mis seres más queridos), que por suerte han quedado sólo en "problemillas" que, unos se han superado y otros, están en vías de solucionarse.
- Cambios laborales de miembros de mi familia, para bien afortunadamente, que apenas he sabido disfrutar.
- Superaciones personales muy retadoras, que aún no sé cómo he podido alcanzarlas, porque ni recuerdo cómo lo hice.
- Éxitos profesionales que me han servido de poco, porque no he tenido ni tiempo, ni fuerzas para vivirlos
- Experiencias personales diferentes, que ojalá me hubieran sabido a más
- Relaciones sociales y humanas de gran envergadura, que me han pasado como un suspiro
- Ausencias de personas por no poder dedicarles tiempo (ni siquiera ni por teléfono!)
- Viajes a destinos diferentes, de los que ya casi ni recuerdo, porque mi cabeza no acompañaba a mi cuerpo.
- etc...
Y llegado este día, con todo esto en la memoria, me pregunto: ¿qué me ha aportado haber vivido este año? y ahora, desde la tranquilidad y la reflexión y después de haber pasado por todo eso, puedo decir que, por un lado me ha aportado muy poco... pero gracias a ello, he aprendido muchas cosas que me servirán de base a partir de mañana:
- No quiero seguir viviendo para trabajar. Quiero trabajar para vivir!
- No quiero anteponer la salud al trabajo, porque pasa una factura muy desagradable.
- No quiero no estar con mi seres queridos, cuando más falta les hago y/o me hacen, porque mi implicación al trabajo es mayor que ellos.
- No quiero perderme momentos con mis amigos, ni amigos que viven los momentos.
- No quiero vivir como una máquina, programada cada día, atendiendo a una agenda.
- No quiero que vuelva a acabar el 2019 y me queden 15 días de vacaciones por disfrutar (como me ocurre hoy), porque no he podido cogerlos por exceso de trabajo.
- No quiero limitar las conversaciones con mi marido a "qué tal tú día?" y poco más, porque el cansancio me puede de tal manera que ni soy capaz a mantener otro tipo de charla.
- No quiero hacer lo que otros me manden, porque sí. Quiero hacer lo que me gusta, me aporta, me motiva...
- No quiero dejar de comer, porque no tenga tiempo ni para hacerlo por seguir trabajando.
- No quiero que los miedos ahoguen mis sueños.
- No quiero llegar a un destino en coche y no recordar ni por las calles que pasé, porque mi cabeza estaba en otras cosas y al volante era simplemente una autómata.
- No quiero tener que llevar a Anko (mi perrhijo) con mis padres, porque no tengo tiempo para darle la vida que se merece.
- No quiero seguir siendo una "crack" para la gente (me califican así muchas personas), si para mí no me sirve de nada.
- No quiero tener que aparcar mis hobbies (entre ellos, escribir por aquí) por estar absorbida por el trabajo.
En definitiva, no quiero estar mal, ni llorar sin sentido, ni tener la sensación de estar haciendo las cosas mal al vivir de distinta manera a la que quiero, ni agobiarme con pensamientos negativos, ni romperme la cabeza por dar prioridades a lo que no debo, ni hacer que los días pasen sin más, ni vivir corriendo, ni ocupar mi tiempo en lo que no vale la pena, ni perder amigos, ni dejar de sumar, ni hacer lo que de verdad importa y vale la pena... Quiero ser 100% FELIZ!!
Y sé, que este año que mañana entra, lo voy a lograr.
Voy a luchar por mi sueño (creo que ha llegado el día, el momento y la ocasión para ello), voy a VIVIR LA VIDA COMO SI CADA DÍA FUERA EL ÚLTIMO, voy a dar prioridad a lo importante y voy a hacer que la vida sume!😉😊😄 Y tú?, me sigues?
Por todo ello y porque estoy 100% convencida de que ESTE VA A SER MI AÑO... tengo ganas de que llegue ya mañana, de empezar de cero, de superar retos, de frenar, de acelerar, de cambiar el mundo, de aportar valor... en definitiva, TENGO GANAS DE VIVIR y no voy a desperdiciar cada día que se me abra en mis ojos. Más que nada, porque HOY ESTOY... PERO QUIZÁS MAÑANA NO! Así que, como ves, estoy a tope y quiero comerme el 2019!!!!!!!!!!. 😜😝😛
Feliz Año 2019, también para ti! Y como siempre digo, espero que mis reflexiones también te sirvan y te unas a mis "no quiero" para que este año, también sea tu año.
Nos leemos prontito... Que pases una Feliz Nochevieja!
Besos varios y abrazos de oso!
No hay comentarios:
Publicar un comentario